¿Te gustaría aprender a hacer un risotto con champiñones tan cremoso y sabroso como el de los mejores restaurantes italianos? Pues estás de suerte, porque en este artículo te vamos a enseñar paso a paso cómo elaborar esta receta de forma fácil y rápida. Además, te daremos algunos consejos y trucos para que tu risotto quede perfecto y puedas sorprender a tus invitados con un plato de nivel profesional.
El risotto es un plato típico de la cocina italiana que consiste en arroz cocido lentamente con caldo y otros ingredientes, hasta conseguir una textura melosa y un sabor intenso. El secreto de un buen risotto está en la elección del arroz, el caldo y el queso, así como en la técnica de cocción, que requiere paciencia y atención.
Para hacer un risotto con champiñones necesitarás los siguientes ingredientes:
- 400 g de arroz especial para risotto (arborio, carnaroli o bomba)
- 200 g de champiñones frescos
- 1 cebolla
- Vino blanco
- Caldo de verduras, al menos 2 litros
- Queso parmesano o grana padano
- Albahaca fresca
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra recién molida
Estos son los pasos que debes seguir para preparar tu risotto con champiñones:
- Prepara el caldo de verduras. Puedes hacerlo casero o comprarlo ya hecho, pero asegúrate de que sea de buena calidad, pues va a influir mucho en el sabor del arroz. Si lo haces casero, solo tienes que poner en una olla 3 litros de agua con una cebolla, un puerro, dos zanahorias, unas ramas de perejil, sal y aceite. Cuece todo durante unos 30 minutos a fuego medio y luego cuela el caldo. Mantén el caldo caliente en una olla o en el microondas, pues lo irás añadiendo poco a poco al arroz.
- Limpia y pica la cebolla en trozos pequeños. Lava los champiñones con un cepillo o un paño húmedo, retírales las raíces y córtalos en láminas o en cubos, según tu preferencia.
- Calienta aceite en una cazuela amplia y baja, y sofríe la cebolla a fuego medio hasta que esté transparente, sin que se dore. Añade los champiñones y saltea unos minutos, hasta que suelten su agua y se evapore. Salpimienta al gusto.
- Añade el arroz a la cazuela y remueve bien para que se impregne del aceite y las verduras. Sube el fuego y vierte un chorro de vino blanco, lo suficiente para cubrir el arroz. Deja que se evapore el alcohol, removiendo de vez en cuando.
- Baja el fuego a medio-bajo y empieza a añadir el caldo caliente al arroz, cucharón a cucharón, sin dejar de remover. El secreto del risotto es no cubrir demasiado el arroz con el caldo, sino añadir lo justo para que vaya cociendo. Espera a que se absorba el caldo antes de añadir más. Este proceso puede durar unos 20 minutos, dependiendo del tipo de arroz y del punto que te guste.
- Cuando el arroz esté al dente, es decir, cocido pero firme por dentro, apaga el fuego y añade el queso parmesano rallado al gusto. Remueve bien para que se funda con el arroz y le dé cremosidad. Ajusta de sal y pimienta si hace falta.
- Sirve el risotto con champiñones caliente, espolvoreado con más queso parmesano si quieres y decorado con unas hojas de albahaca fresca.
¡Y ya está! Ya tienes listo tu risotto con champiñones para disfrutarlo solo o acompañado. Te aseguramos que es una receta deliciosa que no dejará indiferente a nadie.
Pero antes de que te pongas manos a la obra, queremos darte algunos consejos y trucos para que tu risotto quede aún mejor:
- Elige un arroz adecuado para el risotto. Los más recomendados son el arborio, el carnaroli o el bomba, pues son arroces de grano redondo y corto que tienen mucho almidón y absorben bien el caldo y el sabor. No uses arroces de grano largo o vaporizados, pues no quedarán cremosos ni melosos.
- No laves el arroz antes de cocinarlo, pues perderá el almidón que le da la textura deseada al risotto.
- No dejes de remover el arroz mientras se cuece, pues así evitarás que se pegue y que se libere el almidón que le da cremosidad. Usa una cuchara de madera o una espátula de silicona para no dañar el grano.
- No te pases de caldo ni de cocción, pues el arroz se pasará y quedará pastoso. El punto ideal del risotto es al dente, es decir, cocido por fuera pero firme por dentro. El caldo debe cubrir apenas el arroz, y se debe ir añadiendo poco a poco, esperando a que se absorba antes de echar más. El tiempo de cocción puede variar según el tipo de arroz y el fuego, pero suele estar entre 18 y 22 minutos. Prueba el arroz antes de apagar el fuego y comprueba que esté a tu gusto.
- Usa un queso parmesano o grana padano de buena calidad, pues le dará mucho sabor y cremosidad al risotto. Puedes rallarlo tú mismo o comprarlo ya rallado, pero evita los quesos en polvo o procesados, pues no tienen el mismo sabor ni textura.
- Añade un poco de mantequilla al final de la cocción, junto con el queso, para darle más brillo y untuosidad al risotto. Es un truco que usan los chefs italianos y que marca la diferencia.
- Dale un toque de color y frescor al risotto con unas hojas de albahaca fresca. También puedes usar otras hierbas aromáticas como perejil, tomillo o romero, según tu gusto.
- Sirve el risotto recién hecho, pues si lo dejas reposar perderá su textura y su temperatura. Si te sobra risotto, puedes guardarlo en la nevera y recalentarlo al día siguiente en una sartén con un poco de caldo o agua, removiendo bien para que recupere su cremosidad.
Esperamos que te haya gustado esta receta de risotto con champiñones y que te animes a probarla en casa. Si lo haces, no dudes en dejarnos un comentario contándonos qué te ha parecido y si tienes alguna duda o sugerencia. También puedes compartir tu foto del risotto en las redes sociales con el hashtag #extrasabor.
Y si quieres aprender más recetas italianas tan ricas como esta, te invitamos a seguir nuestro blog, donde encontrarás platos como la lasaña boloñesa, la pizza margarita o la pasta carbonara. ¡Te esperamos!